martes, 31 de octubre de 2017

El arte de ignorar




"El arte de ser sabio, es el arte de saber qué pasar por alto"
William James

Se cuenta que en una ocasión, un hombre se acercó a Buda y, sin decir palabra, le escupió a la cara. Sus discípulos se enfurecieron.

 Ananda, el discípulo más cercano, le pidió a Buda:

– ¡Dame permiso para darle su merecido a este hombre!

Buda se limpió la cara con serenidad y le respondió a Ananda:

– No. Yo hablaré con él.

Y uniendo las palmas de sus manos en señal de reverencia, le dijo al hombre:

– Gracias. Con tu gesto me has permitido comprobar que la ira me ha abandonado. Te estoy tremendamente agradecido. Tu gesto también ha demostrado que a Ananda y a los otros discípulos todavía pueden invadirle la ira. ¡Muchas gracias! ¡Te estamos muy agradecidos! 

Obviamente, el hombre no daba crédito a lo que escuchaba, se sintió conmocionado y apenado.

Hay situaciones en torno a las relaciones interpersonales que nos generan alegrías y satisfacciones; otras en cambio son fuente de incomodidades, fastidios, sinsabores.

Por salud mental es necesario aprender a identificarlas y evitar los vínculos que nos obstaculizan y nos afectan en nuestro bienestar y equilibrio.

Esto implica un ejercicio personal de control de emociones e impulsos, evitar reaccionar en automático.

Incluso la práctica del no juzgar permitirá que no veamos las cosas solo desde nuestra óptica, esto conlleva no poner expectativas para no sentirnos defraudados.

Simplemente conservar la distancia necesaria para no cargar con emociones negativas (a veces menos es más).

Poco a poco aumentará la confianza personal y autoestima, uno sentirá que va tomando el control de las situaciones, lo que implica  experimentar una libertad inherente a la misma.

Diseño: Fito Espinoza.

lunes, 9 de octubre de 2017

NIÑEZ Y CONCIENCIA


Si llevas la infancia contigo, nunca envejecerás. Tom Stoppard


Los niños son nuestros grandes maestros de felicidad perfecta y amor incondicional. 


Ellos están empezando a descubrir el mundo, a descubrir la libertad, lo que conlleva además, la libertad de arraigarse, de descubrir, de incluso exponerse y equivocarse, pero también de superarse.

La niñez implica el desarrollo tanto cognitivo, como social,  emocional, físico; una retroalimentación constante.


Es en la infancia cuando se producen momentos irrepetibles que quedan marcados en nuestro recuerdo y que muchas veces influencia nuestro destino.

Porque somos todo lo bueno y lo malo que vivimos alguna vez, la sumatoria de experiencias que nos marcaron. 

Precisamente son esos años de inocencia los que nos dejan enseñanzas de una riqueza infinita.

En la niñez todo eso es posible y real, porque en ese mundo de ilusión vive la magia que traemos desde niños ... la que nunca debemos dejar escapar.


Ps. Rocxana Croce P.





Duelo, un proceso emocional y personal

Sobrellevar la pérdida de un ser querido puede ser uno de los mayores retos a los que el ser humano se enfrenta. La forma cómo cada persona ...